COMENTARIO: "Cantando bajo la lluvia"
"Singing in the rain" (Cantando bajo la lluvia)
"I'm singing in the rain
Just singing in the rain
What a glorious feeling
I'm happy again"
What a glorious feeling
I'm happy again"
Cantando bajo la lluvia es una película musical de 1952 dirigida por Gene Kelly y Stanley Donen. Está considerada como el mejor musical del cine estadounidense por el American Film Institute.
FICHA TÉCNICA:
Fecha de estreno: 11 de abril de 1952
País de estreno: EEUU
Idioma: inglés
Dirección: Stanley Donen, Gene Kelly
Guión: Betty Comden, Alfred Green
Montaje: Adrienne Fazan
Producción: Arthur Freed
Productora: Metro-Glodwyn-Meyer
Distribución: Loew's Inc.
Distribución: Loew's Inc.
Presupuesto:
$2 540 000
Género: musical
Duración:103 min
Música: Lennie Hayton
Canciones: Nacio Herb Brown (música), Arthur Freed (letra)
Canciones: Nacio Herb Brown (música), Arthur Freed (letra)
Fotografía: Harold Rosson
Reparto:
Reparto:
- Gene Kelly - Don Lockwood
- Debbie Reynolds - Kathy Selden
- Donald O'Connor - Cosmo Brown
- Jean Hagen - Lina Lamont
Gene Kelly fue un actor, cantante, bailarín, director y coreógrafo estadounidense. Nació el 23 de agosto de 1912 en el seno de una familia obrera de Pittsburgh, Pennsylvania. Kelly se graduó como economista en la Universidad de Pittsburgh y en medio de la Gran Depresión económica, abrió un salón de bailes donde enseñaba y desarrollaba su propio estilo. Debutó en Broadway en el año 1938 y es contratado por los estudios MGM en 1942. En sus inicios se le asocia con la primera actriz Judy Garland, con la que interpreta El pirata (1948). Más adelante realiza e interpreta tres películas que marcan la historia del musical: Un día en Nueva York (1949), Cantando bajo la lluvia (1952) y Siempre hace buen tiempo (1955). La otra gran película durante este periodo es Un americano en París (1951), año en que recibió un Óscar especial por sus aportes al Séptimo arte. Después de unos años en aparente olvido, recuperó la fama al dirigir a Barbra Streisand en Hello Dolly', así como a James Stewart y Henry Fonda en The Cheyenne Social Club. Gene Kelly falleció en Beverly Hills, el 2 de febrero de 1996 por complicaciones de dos apoplejías sufridas en febrero de 1995 y julio de 1994.
El público y la crítica ansían el estreno de la nueva película (muda) de
los actores de moda Don Lockwood y Lina Lamont a los que la prensa ha
emparejado creando una historia de amor falsa. Él es un actor humilde
que con trabajo ha ido forjando su carrera. Ella, sin embargo, es una
actriz cursi muy admirada en el cine mudo. Con la llegada del cine sonoro, los productores quieren introducir sonido en la película, encontrándose con el obstáculo de la irritante voz de Lina. Es entonces cuando Don conoce a Kathy Selden y rapidamente se enamora de ella. Kathy jugará un papel importante en la película de Don y Lina y ayudará al protagonista a volver a triunfar en el mundo del cine.
En Delitos y faltas el personaje protagonizado por Woody Allen (Cliff Stern) le contaba al de Mia Farrow (Halley Reed) que Cantando bajo la lluvia era algo así como una película imprescindible en momentos de bajón existencial. La proyectaba “cada dos meses para mantenerse de buen humor”. Y es cierto que produce un optimismo tan absurdo como sanador y quizás ese sea el motivo por el cual, mas de medio siglo despues, sigue siendo un film inmortal y clasificado como uno de los mejores musicales de la historia.
Se trata de una película fácil de entender y todavía más fácil de ver. Acostumbrados a unos musicales en los que se intercalaban coreografías cada 5 minutos, lo que provocaba un cine repetitivo y poco original, llegó despues de la guerra una renovación del género de la mano de Vincente Minelli y el propio Stanley Donen. La comedia musical se olvida de las referencias teatrales y comienza a introducir números musicales como continuación lógica de la acción, es así que el diálogo y los números musicales están conjugados de tal manera que el ritmo del desarrollo de la trama es fluido.
Con la película, en la que homenajean los primeros años del cine sonoro, se desprende constantemente un aura de alegría y vitalidad que provoca que desde el minuto 1 te sientas contagiado y no puedas parar de mirar. Un insuperable Gene Kelly, siempre con una sonrisa en la cara, formidable en cada escena e impecable en todas las coreografías. Un Donald O´Connor que con sus muecas y actuaciones como la de Make’m laugh no podrás parar de reír. Una Jean Hagen que nos regala momentos impactantes y no se la ve tan mosquita muerta como aparenta. Y una bellísima Debbie Reynolds, que aún siendo la dulzura personificada, se opone al protagonista en diversos momentos, algo totalmente inesperado teniendo en cuenta la época de la que estamos hablando.
Pero a pesar de toda la alegría que transmite, yendo más allá nos encontramos una sociedad de época que deja mucho que desear. Un machismo congénito en el que la mujer queda en un segundo plano y está supreditada a lo que un hombre decida; no puede hablar ni manifestar como se siente, porque no vaya a ser que diga algo que no interesa. Una industria cinematográfica que se mueve por conveniencia y pretende conseguir dinero sin importar como, aunque sean quebrantadas la moral o los ideales. Una constante mentira en toda la película que se ve perfectamente reflejada en partes tan importantes como:
Aún con todos estos matices, no deja de ser una película extraordinaria que marcó un antes y un después en la comedia musical y que sería fuente de inspiración para otras muchas que vendrían detrás. Dejó escenas que serán recordadas siempre, como la más que famosa escena de Gene Kelly cantando bajo la lluvia, que le da título al film. A pesar de ser la más famosa, en mi opinión personal si tengo que resaltar una escena musical que me pareciera magnífica, esa es la escena de Good morning, en la que participan Don, Kathy y Cosmo. Una de mis escenas favoritas de toda la película sin lugar a dudas. Con todo, cada escena es diferente y cada una te transmite cosas distintas, es por eso que al juntarlas da lugar a un resultado inigualable y a una película inolvidable.
En Delitos y faltas el personaje protagonizado por Woody Allen (Cliff Stern) le contaba al de Mia Farrow (Halley Reed) que Cantando bajo la lluvia era algo así como una película imprescindible en momentos de bajón existencial. La proyectaba “cada dos meses para mantenerse de buen humor”. Y es cierto que produce un optimismo tan absurdo como sanador y quizás ese sea el motivo por el cual, mas de medio siglo despues, sigue siendo un film inmortal y clasificado como uno de los mejores musicales de la historia.
Se trata de una película fácil de entender y todavía más fácil de ver. Acostumbrados a unos musicales en los que se intercalaban coreografías cada 5 minutos, lo que provocaba un cine repetitivo y poco original, llegó despues de la guerra una renovación del género de la mano de Vincente Minelli y el propio Stanley Donen. La comedia musical se olvida de las referencias teatrales y comienza a introducir números musicales como continuación lógica de la acción, es así que el diálogo y los números musicales están conjugados de tal manera que el ritmo del desarrollo de la trama es fluido.
Con la película, en la que homenajean los primeros años del cine sonoro, se desprende constantemente un aura de alegría y vitalidad que provoca que desde el minuto 1 te sientas contagiado y no puedas parar de mirar. Un insuperable Gene Kelly, siempre con una sonrisa en la cara, formidable en cada escena e impecable en todas las coreografías. Un Donald O´Connor que con sus muecas y actuaciones como la de Make’m laugh no podrás parar de reír. Una Jean Hagen que nos regala momentos impactantes y no se la ve tan mosquita muerta como aparenta. Y una bellísima Debbie Reynolds, que aún siendo la dulzura personificada, se opone al protagonista en diversos momentos, algo totalmente inesperado teniendo en cuenta la época de la que estamos hablando.
Pero a pesar de toda la alegría que transmite, yendo más allá nos encontramos una sociedad de época que deja mucho que desear. Un machismo congénito en el que la mujer queda en un segundo plano y está supreditada a lo que un hombre decida; no puede hablar ni manifestar como se siente, porque no vaya a ser que diga algo que no interesa. Una industria cinematográfica que se mueve por conveniencia y pretende conseguir dinero sin importar como, aunque sean quebrantadas la moral o los ideales. Una constante mentira en toda la película que se ve perfectamente reflejada en partes tan importantes como:
- Cuando Don cuenta como su carrera ha ido avanzando hacia el estrellato y relata como todo fue siempre "fácil" para él, mientras que se suceden imágenes de como sus inicios fueron complicados y no se corresponden a lo que él explicaba
- La relación entre Don y Lina que la productora, junto con los medios de comunicación, se inventaron para conseguir más beneficios
Aún con todos estos matices, no deja de ser una película extraordinaria que marcó un antes y un después en la comedia musical y que sería fuente de inspiración para otras muchas que vendrían detrás. Dejó escenas que serán recordadas siempre, como la más que famosa escena de Gene Kelly cantando bajo la lluvia, que le da título al film. A pesar de ser la más famosa, en mi opinión personal si tengo que resaltar una escena musical que me pareciera magnífica, esa es la escena de Good morning, en la que participan Don, Kathy y Cosmo. Una de mis escenas favoritas de toda la película sin lugar a dudas. Con todo, cada escena es diferente y cada una te transmite cosas distintas, es por eso que al juntarlas da lugar a un resultado inigualable y a una película inolvidable.
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